
FOTOS: Enrique Castruita
En medio del calor de abril, un grupo de mediadores pertenecientes al Programa Nacional de Salas de Lectura, acudieron a la Plaza de Armas de Torreón para obsequiar libros en el marco del Día Mundial del Libro y del Derecho de Autor, en una actividad que, según se informó, se replicó en varios municipios de Coahuila.
Fue a partir de las 17:00 horas que los mediadores comenzaron a arribar al área del quiosco, con bolsas y cajas llenas de libros. Bajo la sombra de la torre-reloj, sacaron los ejemplares; los acomodaron en bancas, otros los pusieron sobre las jardineras. Allí invitaron a los paseantes a acercarse, a tomar uno, a hojearlo, a dejarse llevar por su contenido impreso.
Genoveva García, una de las mediadoras, indicó que el proyecto lleva por nombre Sembrar un Libro y precisamente se trata de “sembrar libros”, acercarse a las personas que se encuentran sentadas en las bancas o que pasean por la plaza y preguntarles si les gusta leer, si les gustaría tomar algún libro gratis.
“El grupo empezó en 2003 aquí en Torreón, pero el programa ya tiene más de 30 años a nivel federal. Es un programa que se dedica al fomento a la lectura. Se llama Programa Nacional de Salas de Lectura. Esa es la actividad de nosotros: promocionar libros para que las personas tengan acceso a la lectura libremente”.
Con ella ha llegado también Covadonga Aguirre, a quien se le puede ver en el Paseo Morelos cada segundo sábado del mes fomentando la lectura con las familias. Ella prefiere trabajar en la calle, por eso se ha unido al proyecto con libros de poemas en prosa, de Oscar Wilde, o los Cuentos del General, de Vicente Riva Palacio.
Matilde Adame es una ciudadana que estaba sentada en una de las bancas cuando llegaron los mediadores. Enseguida se puso a ver los libros. Dice que ella no lee, pero que su hija Erika de 30 años siempre trae un libro entre manos. Ha pensado en ella y por eso ha tomado dos: Canasta de Cuentos Mexicanos, de B. Traven, y Escondrijos de luna, de la lagunera Arcelia Ayup Silveti.
Quien ha traído dos cajas de libros es Mayela Villarreal. Enseguida saca tres volúmenes de El capital, de Carlos Marx, dos más de las Obras Completas, de Marx y Engels. Tiene también algunos libros condensados de la colección del Reader’s Digets. El chiste es que el libro lo encuentre a uno, dice. En eso se acerca un joven egresado de la carrera de ingeniería, y ella comienza el diálogo.
“Lo que guste, lo que guste de acá de la mesa, o de acá, lo que vaya a leer, lléveselo”.
Finalmente, el mediador e historiador Alex Luna, compartió que el Día Mundial del Libro y del Derecho de Autor es una fecha propuesta por la Unesco para conmemorar los fallecimientos de dos grandes escritores: William Shakespeare y Miguel de Cervantes, pilares de las literaturas inglesa y española.
“El propósito es que la gente se acerque a estos espacios para que tomen un libro, lean un poco y cimentar ese fomento a la lectura”.