Dotada de una historia y antropología privilegiadas que le convierten en una entidad singular del norte de México, Coahuila sigue siendo un sitio que cuenta con un muy particular listado de patrimonio histórico-cultural que lo mismo data de la época virreinal y prehispánica, remontándose a la era de los dinosaurios, cuando todo se hallaba sumergido bajo el agua y solo emergía lo que ahora se conoce como la Península de Coahuila.
Enclavada en lo que alguna vez fuera el antiguo Mar de Tetis, el municipio de Cuatrociénegas destaca no solo por las especies endémicas que se encuentran entre sus manantiales sino por el saqueo del agua de las mismas y más recientemente, por la destrucción y el robo de su patrimonio antropológico, como sucedió con el caso de la Cueva Pinta; una cueva adornada con pinturas rupestres y petrograbados de la que fue extraída con sierra eléctrica nada menos que una de sus figuras; caso análogo al de la otra Cueva Pinta, ubicada en el municipio de Peñón Blanco, Durango; donde hace una década manos anónimas hicieron lo mismo con herramienta industrial, robando un bloque en donde aparecía la figura grande de un indígena detallado al interior de lo que fue en su momento un gran sitio ceremonial.
Pese al latrocinio eminente-no siendo la primera vez que esto sucede en sus alrededores-por parte del municipio de Cuatro Ciénegas, no se contemplan protocolos de protección ni en la zona donde ocurrieron los hechos ni en otros sitios del Estado que se encuentran en terrenos privados, según refiere Francisco Aguilar Moreno, Director del Centro INAH de Coahuila:
"Tiene mil 200 hectáreas (el propietario), él tiene una entrada en su rancho con rejas, aquí el detalle es que no hay luz ahí, ¿cómo pones cámaras de vigilancia? La protección se da conforme a las capacidades de cada quien; entonces, la única forma en la que podemos conservar nuestro patrimonio es la concientización, que sepan los alcances de las sanciones que pueden tener. No me gustaría estar en los zapatos de la persona que lo hizo", externó, y puntualizó que la Ley Federal de Zonas y Monumentos Arqueológicos, Artísticos e Históricos contempla entre tres y 10 años de prisión por este delito".
El funcionario asegura que debido a la gran cantidad de patrimonio histórico que posee el Estado es imposible protegerlo con personal de seguridad, por lo que la apuesta es la concientización entre la sociedad:
"En Coahuila tenemos más de tres mil sitios en 252 mil kilómetros de estado, imagínate, no me alcanzaría toda la policía ni la Guardia Nacional para cuidar estos espacios. Lo que se hace es que tenemos capacitación constante con tour operadores, que es parte de nuestro trabajo para la conservación y difusión del patrimonio, y su cuidado. La única forma de cuidar este vasto patrimonio cultural, con el que cuenta el país, no sólo Coahuila, es con la concientización a la población".
Según estimaciones del arqueólogo al que se encomendó por parte de esta Dirección hacer la denuncia ante la FGR, el grabado-fechado entre los 1000 y 500 años de antigüedad como mínimo, pues fue cueva ocupada durante varias temporalidades-abarca un área de 40 por 40 centímetros, de donde extrajeron la pieza, aunque se cree que fue destruido al intentar ser robado, por lo que la denuncia ante la Fiscalía va por destrucción de patrimonio histórico.
Menciona el Director del Centro INAH de Coahuila, tras falla en vigilancia local, que ni con toda la policía o la GN alcanzaría para cuidar los 3 mil sitios arqueológicos.
Sin embargo, para las más de dos administraciones federales que el citado funcionario tiene en nuestro Estado repitiendo como tal en el mismo puesto, ya era para que hubiera propuesto y hasta diseñado, en coordinación y convenio con autoridades estatales municipales y de seguridad pública, desde mapas de zona y protocolos específicos de protección y vigilancia para este y otros tantos sitios de interés histórico, lo cual no ha hecho, por lo que su respuesta sigue siendo insatisfactoria en este como tantos otros casos en los que el saqueo-como en San Rafael de los Milagros, Coahuila-se repite impunemente.