">">

Columnas Social columnas editoriales SOCIALES

columnas

Vibremos positivo

VIOLENCIA VICARIA: CUANDO EL DAÑO LLEGA A TRAVÉS DE LOS HIJOS

PILI PAVÓN.-

En México, hay una forma de violencia contra las mujeres que aún pasa desapercibida para muchos, pero que deja huellas profundas: la violencia vicaria. Este tipo de agresión ocurre cuando una persona, generalmente una expareja, utiliza a los hijos o seres queridos como una forma de venganza para causar dolor emocional a la mujer. Sí, como lo lees: el amor de una madre por sus hijos se convierte en la vía por la cual el agresor busca lastimarla.

Este tipo de violencia ha sido visibilizada gracias al trabajo de colectivas y organizaciones que han puesto el tema sobre la mesa. De hecho, el término fue acuñado por la psicóloga argentina Sonia Vaccaro, y desde entonces ha servido para nombrar lo que muchas mujeres han vivido en silencio por años.

En México, el problema es grave. El Frente Nacional Contra la Violencia Vicaria (FNCVV) reportó que en 2021 se registraron 2,865 mujeres víctimas de esta violencia; para 2022 la cifra creció a 7,650. Eso representa un aumento del 167% en solo un año. Según el colectivo Amorosas Madres contra la Violencia Vicaria, actualmente hay más de 7,000 casos documentados, siendo el Estado de México y la Ciudad de México las entidades con más denuncias.

¿Pero qué implica vivir esta violencia? Implica que a una mujer se le arrebate a sus hijos sin justificación, que se le impida verlos, que se le amenace con quitárselos si denuncia una agresión, o que se usen procesos legales en su contra para desacreditarla como madre. En los casos más extremos, se han documentado agresiones físicas o incluso asesinatos de niñas y niños para castigar a la madre.

En enero de este año, se reformó la Ley General de Acceso de las Mujeres a una Vida Libre de Violencia a nivel federal, así como los Códigos Penal y Civil Federales, para incluir y sancionar este tipo de violencia. Las penas pueden alcanzar hasta cinco años de prisión. Además, 28 estados ya han aprobado leyes sobre violencia vicaria, pero solo 10 lo han tipificado como delito específico, entre ellos Aguascalientes, Baja California, Michoacán y Yucatán.

Aunque ya hay avances, aún falta mucho. Es urgente que todas las autoridades -jueces, policías, ministerios públicos- estén capacitados para reconocer la violencia vicaria y no revictimicen a las mujeres. También es clave que la sociedad deje de pensar que una madre que lucha por ver a sus hijos es "exagerada" o "conflictiva". En realidad, muchas están enfrentando un infierno legal, emocional y económico solo por querer ejercer su maternidad.

Hablar de violencia vicaria es hablar de un problema que no solo afecta a las mujeres, sino también a niñas y niños que crecen en medio de conflictos manipulados, alejados de sus madres o usados como herramientas de control. Si queremos un país más justo, necesitamos empezar por reconocer que ninguna forma de violencia debe ser normalizada, mucho menos aquella que atraviesa los vínculos más sagrados: los afectos.

Desde Fundación Femmex alzamos la voz por todas las madres que viven esta forma de violencia. Es momento de que se escuche su historia, se aplique la ley y, sobre todo, se proteja el bienestar de quienes más lo necesitan: las mujeres y sus hijos.

Nombrar lo que duele es el primer paso para transformarlo. Hablemos de violencia vicaria, informémonos y acompañemos a quienes están pasando por estas situaciones. Porque ninguna mujer debería ser castigada por querer vivir en paz.

Te invitamos a seguirnos en nuestras redes sociales, en Facebook como vibremospositivo y Fundación Femmex o, en Instagram como @jorge_lpz, @vengavibremospositivo y @ffemmex, @pilipavoncreativa.

Leer más de Columnas Social

Escrito en: Vibremos positivo Columnas

Comentar esta noticia -

Noticias relacionadas

Siglo Plus

+ Más leídas de Columnas Social

LECTURAS ANTERIORES

Fotografías más vistas

Videos más vistos semana

Clasificados

ID: 2375847

YouTube Facebook Twitter Instagram TikTok

elsiglo.mx