Antes de entrar a La Academia, Fátima Molina, hacía teatro musical en Guadalajara. (TV Azteca)
Se partió hasta el alma para poder llegar a La Academia, durante varias semanas dio lo mejor de sí; sin embargo, el público no la apoyó el domingo, razón por la que tuvo que irse y es que como ella misma dice, “esto es una competencia y ni modo, voy a salir adelante”.
La originaria de Jalisco, Fátima Molina Vargas, quien interpretó la canción Antología en el concierto número nueve, se convirtió el fin de semana en la octava expulsada de la última generación de La Academia.
En entrevista con esta casa editora, la joven comentó que, a unas horas de haber abandonado la escuela musical, se siente rara por el hecho de haber vivido tantos días en cautiverio y de repente caminar nuevamente por las calles.
“Apenas estoy asimilando lo que ocurrió, me siento extraña porque pues estuve dos meses y medio encerrada viviendo otro estilo de vida y ahora salgo y estoy en la calle con la gente, es algo extraño. Todavía estoy triste, el domingo la verdad me puse muy mal, pero ni modo sé que esto se me va pasar y voy a salir adelante”.
El 26 de octubre también estaban nominados para salir Wilfredo y Perla, por lo que junto con Fátima tuvieron que concursar en la temida Ruleta de la Muerte, en la cual interpretan a capela melodías al azar que van del rap a la cumbia.
“Fue horrible llegar a la ruleta. No sabes ni qué vas a cantar y estás pensando a mil por hora, por dentro imploraba que no me tocara el rap porque no iba a saber qué hacer. Estaba muy nerviosa, creo que tanto yo como Perla y Wilfredo teníamos la adrenalina al 100 por ciento”.
Molina señaló que en el concierto del domingo notó un gran avance entre sus compañeros y ella. “Siento que avanzamos mucho en todos los aspectos, sí hubo algunas fallas pero lo demás lo vi bien y aunque estoy triste a la vez me da alegría el saber que di muchas cosas de mí, me entregué al máximo y me partí todo para estar ahí adentro”.
La tapatía dijo que el haberse retirado de la sexta generación no le impedirá que siga su lucha por destacar en la farándula del país.
“Tengo que esperar a que termine el ciclo de La Academia, para poder empezar a estudiar artes escénicas y seguir buscando oportunidades. Aparte de cantar también me gusta el teatro así que tengo mucho campo para aprovechar”.
Antes de ingresar al reality de la Televisora del Ajusco, la chica hacía teatro musical en su natal Jallisco. “Estaba en la onda de los musicales, hacía mucho teatro en Guadalajara, incluso dejé un proyecto por entrar a La Academia”.
Como se sabe, Fátima comenzó una relación amorosa con Matías, incluso el joven se le declaró el domingo 19 de octubre ante las cámaras situación que se le hizo muy especial a la hoy ex académica.
“Cuando me pidió que fuera su novia fue muy bonito, ya teníamos rato de estar conviviendo, había mucha química, pero pues nomás nos duró una semana el gusto –risas-. Lo voy a extrañar mucho, pero ya hablaremos cuando salga, a ver qué pasa”.
Para la morena, Valeria es su gallo en esta sexta y última generación de La Academia. “Valeria tiene un sello único, es muy especial y tiene todo para ganar”.
