09 octubre 2003
LAS VEGAS, (AP).- El tigre que mordió al ilusionista Roy Horn en el escenario de un casino local trataba en realidad de ayudar a su amo cuando éste perdió el equilibrio, y lo lesionó sin querer utilizando demasiada fuerza, dijo el colega y asociado de la víctima, Siegfried Fischbacher.
"Un gato es un tigre y cuando desea proteger a alguien lo hace de la manera que lo hace un tigre, con la fuerza", dijo Fischbacher en una entrevista transmitida el jueves por un canal de la televisión norteamericana. "Pero nosotros somos humanos, somos un poquito más frágiles".
"El animal se dio cuenta de que algo andaba mal", agregó. "Roy resbaló y yo corrí en dirección al escenario y los demás domadores corrieron hacia el escenario, de modo que el animal quedó simplemente confuso".
El miércoles, Fischbacher dijo en otro programa televisivo que se hallaba entre bastidores cuando Horn, de 59 años, fue lesionado el viernes por el tigre blanco llamado Montecore.
El ilusionista resbaló y el tigre se lanzó para agarrar el brazo de Horn, dijo Fischbacher. Después, Horn trató de liberarse de sus fauces golpeando al tigre en la cabeza con un micrófono, pero el animal de 270 kilos se le lanzó al cuello y lo arrastró fuera del escenario ante unos 1.500 espectadores congregados en el auditorio del casino The Mirage.
Los empleados del espectáculo utilizaron entonces varios extinguidores de incendio para distraer al tigre, que luego se fue a su jaula. El ilusionista estaba solo en el escenario cuando el tigre le mordió el brazo, pero Fischbacher dijo que el tigre no se proponía matar a Horn. Si ése hubiera sido el caso, dijo, "yo no estaría aquí y Roy no estaría aquí".
Según Fischbacher, Horn balbuceó después del ataque. "No le hagan daño al tigre". Fischbacher dijo que si Horn se recupera, el dúo volverá al escenario. "Quizá tomemos un rumbo distinto, estoy seguro, pero... el espectáculo es nuestra vida".
El apoderado del dúo, Bernie Yuman, dijo el jueves que Siegfried nunca saldría a escena sin su socio de largo tiempo. El dúo "es Siegfried y Roy, y así es como comenzó todo y así es como será siempre", dijo.
Fischbacher, de 64 años, dijo que Horn todavía no puede hablar, pero se comunica con él por medio de gestos con sus manos.
"Así hablamos... y también a través de la mirada", dijo. "Cuando uno ha estado tanto tiempo juntos... él entendía exactamente lo que yo decía. Podía verlo en su rostro".
El tigre continúa en cuarentena en el casino, y el Departamento de Agricultura del gobierno federal ha abierto una investigación del caso.