Feligreses de La Niña Blanca celebraron el Día de Muertos en el santuario localizado en el barrio de Santa María Coatepec, en este municipio.
"Sé que algún día me va a llevar y quiero tener una muerte santa, en paz", dice Luis Ángel, de 17 años de edad, devoto de la Santa Muerte, quien este 1 de noviembre visitó a "La Flaquita" en el templo ubicado en este municipio.
Feligreses de La Niña Blanca celebraron el Día de Muertos en el santuario localizado en el barrio de Santa María Coatepec, en este municipio. Hubo música, comida, oraciones y fiesta durante toda la noche.
"Cuando era niño le tenía miedo a la muerte. Nada más de oír que mi papá y mi mamá morirían algún día me aterraba. Uno de mis tíos es devoto de ella (La Flaquita) y me explicó que no debemos tener miedo", relata Luis Ángel.
El adolescente asegura que la Santa Muerte le ha concedido favores, el principal es que su familia tenga salud.
Agrega: "Mucha gente piensa que por el hecho de creer en la Santísima Muerte somos malos, que andamos en malos pasos. Hay gente que sí es mala y se encomienda a la Santísima, pero no todos somos así. Por ejemplo, hay niños que creen en ella".
Devotos a la Santa Muerte llegaron durante todo el día al templo de Tultitlán. En sus manos llevaban a su "Santa" y pequeñas ofrendas, como flores, frutas y bolsitas trasparentes con semillas, chocolates y dulces, que fueron colocadas en los altares.
Isaac Solano acudió al templo con su esposa y dos hijos. Todos son devotos a la Santa Muerte, a la que deben favores. Hace poco La Flaquita hizo posible la compra de un automóvil para esta familia.
Ariana, de 26 años de edad, le pidió a la Santa Muerte regresar con su novio. Todavía no le cumple el milagro, pero su ex pareja ya se comunicó con ella por teléfono.
"Me hablaban mucho de ella. Me decían ‘ve a pedirle, ofrécele y vas a ver'. No me importa lo que piensen las demás personas, yo creo en Dios y en ella, y cada quien", menciona.
Agrega que "le doy gracias, la verdad me siento a gusto por todo lo que me ha dado. Vine a dejarle unas rosas y su veladora de agradecimiento".
El templo a la Santa Muerte de Tultitlán fue adornado con velas y ofrendas en todas las imágenes de la Niña Blanca. Por la noche hubo fiesta, con música, comida y bebida.
Enriqueta Vargas Ortiz, la "Madrina Enriqueta", dio que este 2 de noviembre realizará oración en el penal de Tizayuca, Hidalgo. Espera que sea la primera de muchas veces que se reúna con presos para orar a la Santa Muerte.
