Bocadillos poco saludables
La mayoría de las personas estamos familiarizadas con los términos anorexia y bulimia, dos graves trastornos de la alimentación. Sin embargo, existe uno que resulta poco común, debido a su poca prevalencia y poca incidencia. Se trata de la Pica, una extraña enfermedad que provoca en el paciente la necesidad de comer sustancias no destinadas al consumo humano, tales como: gis, tierra, madera, pelo... hasta objetos impensables como clavos y heces fecales. "Existen muy pocos casos reportados y muy pocos casos que prevalecen a lo largo del tiempo", señala el psicólogo Antonio Miranda.
Este trastorno fue bautizado con ese nombre en alusión a la urraca, animal al que se le conoce también como "Pica, Pica", la cual forma su nido con todo tipo de materiales. A decir del licenciado Miranda, es una enfermedad que no siempre es detectada, pues mucha gente la relaciona con situaciones nutricionales o consideran que es una etapa de la niñez en la que los niños se llevan todo tipo de objetos a la boca. "La gente dice que el niño come tierra o gises porque le hace falta calcio, hierro, etc... y esto puede ser cierto, pues medicamente esta comprobado. Sin embargo, deben de existir ciertas condiciones para que pueda diagnosticarse como Pica".
Estas condiciones serían:
Que el padecimiento dure más de un mes.
Que las sustancias no sean nutricionales, o bien que el trastorno no se derive de una carencia de nutrientes.
Que no vaya acompañado de un trastorno psicológico, como la esquizofrenia o el autismo.
"Esta enfermedad se da más en niños que en niñas y aparece con mayor frecuencia en la niñez, aunque también los adultos pueden padecerla. Es importante que no se confunda con un trastorno mental, en donde la persona pierde todo contacto con la realidad, y en su delirio, empieza a comer sustancias como las heces", señala el psicólogo.
Trasfondo psicológico
Algunos especialistas afirman que el individuo con pica desea conseguir atención, evadirse de situaciones que no le agradan o autoestimularse. Otros afirman que es una respuesta al estrés, muy asociada con la ansiedad. "A nivel psicológico tiene que ver con una percepción, la alimentación siempre se relaciona con la imagen materna o con la dependencia, y si se tiene un problema con ingerir cosas que no son nutritivas, estamos hablando de que psicológicamente existe un daño o la no integración de objetos totales dentro de la psique".
A la Pica también se le ha relacionado con las sensaciones que provocan ciertas texturas en el individuo. "Las mujeres embarazadas hacen mucho esto. Hay mujeres que comen hielo, gis, pero nada tiene que ver con el trastorno. Sin embargo, hay que estar atentos para que no se convierta en un problema de Pica que dañe al desarrollo del bebé”.
Casos extremos
Es importante detectar que una persona padece de Pica, para poder corregirlo a tiempo, pues existen casos extremos de personas que llegan a ser intervenidas quirúrgicamente por graves problemas gastrointestinales. Por ejemplo, en el caso de las personas que comen pelo, se forma una enorme "bola" de pelo en el intestino que impide el paso de la comida.
El Licenciado Miranda recomienda la terapia cognitivo conductual para tratar este síndrome, así como la medicación adecuada. "Se tiene que castigar la conducta poco apropiada, en este caso el hecho de comer sustancias no nutritivas, y premiar a la persona cuando coma de manera saludable".
La ayuda de un psicólogo, psiquiatra, internista o gastroenterólogo y un nutriólogo son indispensables. "Las terapias para que tengan efecto deben durar al menos 6 meses, pero la intervención tiene que ser multidisciplinaria, un cuidado psicológico, psiquiátrico y una valoración médica para analizar el nivel de daño, y si apenas está empezando el trastorno, saber exactamente como intervenir”.
TIPOS DE PICA
Acufagia: ingestión de objetos agudos como vidrios, clavos, metales.
Coprofagia:comer excremento, lo que ocasiona peligrosas enfermedades parasitarias.
Geofagia: ingestión de tierra, que ocasiona parasitosis severas.
Mucofagia: ingestión de mocos, que puede provocar infecciones gastrointestinales.
Pasofagia: ingestión de hielo.
Tricofagia: ingestión de cabello o lana.
Litofagia: ingestión de piedras o ladrillos.
Xilofagia: ingestión de madera.