Un tip que puede ahorrar mucho tiempo. (INTERNET)
Las filas son inevitables y también muy fastidiosas, pero son parte de la vida; hay tantos humanos en el mundo que cuando se requiere algún servicio, encontrarse con que hay gente esperando formada en fila es un escenario común.
Pero las matemáticas han encontrado una solución a este problema. Por inercia, la gente elige la fila que parece más rápida; la lógica respalda la decisión, pues se espera que la fila que parece estar avanzando más rápido, continuará de esta forma. Las matemáticas dicen que esto muchas veces es un error.
Si en un supermercado la fila más larga tiene cuatro cestas casi vacías y la más corta tiene dos carritos muy llenos. ¿Cuál es la mejor opción?
Lo importante es el número total de productos, no el número de clientes. Para las matemáticas a esto se le llama ‘distribución del tiempo de servicio’, una variable aleatoria que mide cuánto tiempo le llevará a un cliente ser atendido.
Esta variable contiene información sobre el promedio de tiempo de servicio y la desviación estándar de la media, la cual representa cómo el tiempo de servicio fluctúa dependiendo de los diferentes tiempos que necesita cada cliente.
Otra variable es la frecuencia con la que los clientes se unen a la cola (la tasa de llegada). Esto hará depender la cantidad promedio de tiempo que se pasa entre dos clientes consecutivos que entran en la tienda. Cuantas más personas lleguen a usar un servicio en un momento específico, más largas serán las colas.
Las variables también dependen del establecimiento. Si en un restaurante de comida rápida hay dos cajeros tomando pedidos, lo lógico es elegirla fila más corta, ya que el tiempo de atención no varía mucho. Si la fila es casi igual, el truco psicológico es elegir la fila de la izquierda, ya que por inercia la mayoría de la gente se irá hacia la derecha.
En corto, las variables son tantas que es difícil determinarlo con exactitud.
Dan Meyer es un investigador que aplicó una ecuación para ayudar a discernir entre las filas más lentas en las tiendas. Él descubrió que un dependiente realiza dos tipos de acciones cuando atiende a una persona: saludarlo, cobrar y despedirse como fórmula básica y, en segundo lugar, el paso de cada artículo.
Meyer se dio cuenta que para la primera acción, el cajero tarda 41 segundos en promedio con cada persona, mientras que por artículo, se tarda en promedio unos 3 segundos.
Así que si hay una fila de caja rápida con muchas personas que compran pocos artículos y una fila con pocas personas pero con carritos llenos, lo más probable es que se pase primero en la fila con los carritos llenos, porque el dependiente tardará menos tiempo pasando todos esos artículos (aunque sean más productos son 3 segundo por cada uno), que saludando a tantas personas (pasará por lo menos 41 segundo con cada cliente incluso si sólo compran un artículo).
