
Nadie sabe con exactitud qué tan extensa es la excavación. (INTERNET)
Santiago Sánchez se despierta todos los días a las 3 de la mañana para cavar un hoyo. El hombre de 69 años lleva 18 años haciéndolo, porque dice que Dios lo llamó y le encomendó esta tarea.
El hombre lleva trabajando en el túnel ubicado por debajo de una jungla todo este tiempo y no planea desistir, porque, según él, es un trabajo de Dios al que él dedicará todos los días de su vida, según reporta la publicación ‘The Daily Mail’.
Sin embargo, Sánchez también admite que no sabe cuál es el propósito de la excavación o si algún día completará el trabajo. Nadie más que él ha entrado a todo el túnel, por lo que tampoco se sabe con exactitud qué tan largo o grande es.