La capacidad de los gatos para adaptarse a recipientes como si fueran liquido, los llevó a convertirse en un meme y también en objeto de un estudio físico asociado con la reología (ESPECIAL)
Sin duda una característica peculiar de los gatos y que los diferencia de otros mamíferos, es la capacidad de su cuerpo al poder adaptarse a diferentes recipientes, algo similar a lo que ocurre con el agua y es por este motivo que surge la duda sobre si los gatos son líquidos.
Para resolver esta duda, el físico Marc-Antoine Fardin, de la Universidad de París-Diderot, realizó un estudio a través de la reología que poseen los gatos y que incluso lo llevó a ganar el Premio Ig Nobel en 2017.
Cabe señalar que la reología es una rama de la física dedicada al estudio de la deformación y la fluidez de los cuerpos, así como el tiempo que tardan en adaptar su forma a recipientes, por lo que de acuerdo a las investigaciones realizadas por Fardin, los gatos son capaces de adecuarse a las condiciones del lugar donde se encuentran si se les da la duración necesaria para que lo hagan.
Debido a que en reología es importante el tiempo de relajación que le toma a la materia para adaptarse, con los gatos ocurre lo mismo aunque con ellos puede haber diversos factores que influyan en su cambio como lo es la edad, el tipo de recipiente en el que se encuentren o incluso el grado de estrés en el animal, tanto mecánico como emocional en algunas ocasiones.
A través de el Número de Deborah, un procedimiento utilizado en reología, es posible calcular y comprar el tiempo de relajación y el experimental que le llevará al gato adaptar su cuerpo al recipiente.
El físico señala que la primera vez que se topó con el comentario sobre si los gatos son líquidos o no, le pareció divertido y sobre todo porque incluso se han creado memes sobre esto, pero también es una situación que, si se le presta la atención adecuada, te lleva a reflexionar bastante sobre los cuerpos de los felinos.