Se ha exhortado a los agentes inmobiliarios a no depositar dinero ya que los fraudes se dan en todos los ámbitos. (EL SIGLO DE TORREÓN)
La presidenta de la Asociación Mexicana de Profesionales Inmobiliarios (AMPI), María Teresa Flores Jaquez, alertó por una nueva modalidad de fraude denominado "maleta perdida" que está afectando a personas que se desempeñan en este sector.
Explicó que hay quienes que le piden a los agentes inmobiliarios que les depositen dinero porque se quedaron en otra ciudad, de camino a Durango, a donde necesitan llegar porque tienen la intención de comprar una vivienda.
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Los fraudes se concentran por tres vías: llamadas telefónicas, mensajes de texto y correos electrónicosLes aseguran que tienen un presupuesto para comprar el inmueble de tres millones o más por lo que algunos, con el afán de vender, les depositan el dinero.
"Algunos compañeros ya con la posibilidad de que les van a comprar esa vivienda lo hacen, todavía les digo en este tiempo, inclusive les pasan su INE", indicó.
Para hacerlo más creíble les dicen que ya están en el trayecto las maletas y que las pueden recoger los propios agentes inmobiliarios y les aseguran que ahí vienen sus documentos y por eso se quedaron sin poderse trasladar, "les llegan a pedir 20 mil, 30 mil pesos", manifestó.
Por eso, en cuanto se conoce un caso de este tipo, inmediatamente se le dice al agente que no de el dinero para evitar que se concrete el fraude.
ACOSO EN TODOS LADOS
La entrevistada informó que la violencia a las mujeres se da en todos los sectores, y el inmobiliario no es la excepción.
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Hizo un llamado a sus acreditados a tomar precauciones para evitar ser víctima de un posible delito"Sigue todavía el acoso sexual, sigue todavía el machismo aquí en la ciudad de Durango y en México pero ya las mujeres hoy en día no le temen a eso, ya saben que hay instancias que les pueden ayudar y psicólogos que les pueden ayudar a superar ese acoso", manifestó.
Dijo que se han detectado casos en los que se muestra una casa y pasan cosas como que les van viendo las piernas al subir las escaleras, por lo que optan por pedir el apoyo para que otro agente vaya.
