(ESPECIAL)
En un domicilio donde bebía y se drogaba, Rubí fue asesinada, y presuntamente violada, sin que hasta el momento se sepa quién es el responsable del abuso; el homicidio, según las primeras investigaciones, lo habría cometido la amiga de la víctima quien vive en la casa donde se cometieron las agresiones.
¿Cómo sucedieron los hechos?
Fue la mañana del domingo cuando Saraí Karen, una exconvicta de 28 años, pidió la ayuda de su hermana mayor y le dijo que al interior de su recámara estaba el cuerpo sin vida de Rubí, de 17 años. Una noche antes, la mujer, junto con otras personas, se reunieron en el cuarto que ella habita en la calle Distrito Federal, de la colonia Desarrollo Urbano El Pirú, en la alcaldía Álvaro Obregón.
Ahí, dijo Saraí, bebieron y se drogaron, pero ella comenzó a discutir con Rubí a quien golpeó en repetidas ocasiones hasta dejarla inconsciente. Sin reparar en que la joven ya no se movía, Saraí siguió tomando y drogándose.
Horas después cuando intentó despertarla, se percató que la joven estaba muerta por lo que pidió ayuda a su hermana mayor, Catalina, para tratar de resolver la situación. Fue ella quien informó a las autoridades.
Hasta el lugar llegó personal de la Fiscalía General de Justicia de la Ciudad de México quienes informaron que en el lugar de la agresión se hallaban bebidas alcohólicas y solventes. Precisaron que el deceso de Rubí fue por un traumatismo craneoencefálico severo.
Evidentes, indicios de agresión sexual
Sin embargo, también se determinó que la víctima tenía signos de asfixia y que había sido agredida sexualmente; esto se determinó porque el pantalón que portaba lo tenía hasta las rodillas y fueron hallados en su cuerpo fluidos.
Por lo hechos, Saraí Karen fue detenida acusada del delito de feminicidio; al revisar su historial las autoridades descubrieron que la mujer ya ha estado en prisión en al menos dos ocasiones. En 2015 estuvo presa por robo agravado calificado; en 2019 la mujer volvió a caer presa por los delitos de despojo y robo agravado.
Ahora las investigaciones determinarán quién agredió sexualmente a la joven, porque además de los golpes en el rostro, no tenía ropa interior y eran evidentes los indicios de la agresión sexual, e incluso en una camiseta se halló líquido seminal por lo que en el caso participarán peritos en química. Hasta ayer lunes ningún familiar se había presentado a reclamar el cuerpo de Rubí, de la que las autoridades solo tienen el nombre por los dichos de la agresora.