Banda sinaloense en playa de Mazatlán. Imagen: X
Clarinetes, trompetas, trombones, tuba, tarola, tambora…, cada instrumento emana un sonido diferente, que al unirse con el canto se convierte en la identidad musical de Mazatlán, Sinaloa. “La Perla del Pacífico” es uno de los destinos turísticos de playa más importantes de México. Además de destacar por sus características geográficas, lo hace por el sonido de la banda sinaloense.
No existe una fecha exacta del inicio de este género en la región, sin embargo, la tradición de ofrecer conciertos al aire libre se remonta al siglo XIX. Carlos Martín Gálvez Cázarez describe en su texto “Presencia de la banda en la historia y el desarrollo regional del sur de Sinaloa en el siglo XIX”, el cual forma parte de Bandas de viento en México, que “es probable que esta costumbre existiera ya cuando una flota estadunidense sitió el pueblo en 1847 y permitió a sus propias bandas tocar para el público mexicano”.
Testimonios de aquellos años narran cómo la música era parte de la vida de los habitantes. Reportes de oficiales extranjeros de la Marina, de viajeros, entre otros, mencionan que “era común observar que las bandas de música empleadas a bordo tocaran, asimismo en tierra si se daba la oportunidad”, destacando “el amor de los mexicanos por la música y el baile”.
Varios textos coinciden en que la música de viento fue parte fundamental de la identidad sinaloense a lo largo del siglo antepasado.
SINALOA, CUNA DE TALENTOS
Gálvez Cázarez expone que las bandas más tradicionales son bautizadas de acuerdo a su ubicación geográfica; un ejemplo es El Recodo. El clarinetista Cruz Lizárraga fundó “La Madre de Todas las Bandas” en este pueblo en 1938.
A 27.33 kilómetros de Mazatlán, esta localidad denominada como “tranquila” y con poco más de 621 habitantes, de acuerdo a información de Debate en 2022, vio nacer a esta agrupación, que se ha encargado de ser la emisora de la música regional mexicana a nivel internacional.
El Recodo ha cumplido al pie de la letra la encomienda de don Cruz: “que la música de banda se escuche en todos los ámbitos de la tierra”. Han visitado varios continentes y este 4 de mayo formaron parte del Festival de Camino a Latinoamérica en la explanada de Odaiba, en Tokio, Japón, siendo la segunda ocasión que hicieron sonar la banda en tierra nipona, después del mundial de Corea-Japón 2002.
Otra oriunda de Mazatlán es la Banda MS de Sergio Lizárraga, que el 25 de abril de este año recibió el premio especial Latin AMA Legacy, durante la novena edición de los Latin American Music Awards, como un reconocimiento a sus más de 20 años de carrera artística. Han alcanzado una gran popularidad hasta convertirse en una de las agrupaciones más representativas de la música mexicana y latina.
En Mazatlán también nacieron Julio Preciado, el cantautor mexicano de banda sinaloense que formó parte de El Recodo, y Luis Ángel Franco Rivera, mejor conocido como “El Flaco”, quien saltó a la fama junto a la banda Los Recoditos. Ambos han compartido escenario como solistas.
Rodolfo Edén Muñoz Cantú nació en Los Mochis, Sinaloa, y desde niño desarrolló su gusto por la música. Formó parte de la agrupación Calibre 50 y actualmente lleva su proyecto individual a diferentes partes de la República Mexicana y E.U.A.
También destaca el talento de la Época de Oro del cine mexicano, ya que el cantante, compositor y actor Pedro Infante nació un 18 de noviembre de 1917, en el puerto de Mazatlán. Lola Beltrán, estrella de la canción ranchera, nació en El Rosario, Sinaloa, el 7 de marzo de 1932; sus melodías marcaron toda una época.
Pero el talento no sólo lo tienen quienes han llegado a los reflectores internacionales. Pisando la cálida arena, cerca del mar, hay cientos de soñadores que utilizan un instrumento, un micrófono o una bocina como herramienta de trabajo.
EL DON DE LA MÚSICA
En Mazatlán, una de las formas más comunes de llevar el sustento al hogar es, precisamente, la música. Jesús Javier García Navarro, de 36 años y oriundo de El Verde, municipio de Concordia, posee el don musical desde que tiene memoria. Su localidad de origen está aproximadamente a una hora de Mazatlán, ciudad en la que radica desde hace 27 años, por lo que se considera ya un “mazatleco”.
“Nunca fui a una escuela de música, eso ya lo traigo desde un don, de la cabeza, eso ya es de uno mismo”, dijo a través de una entrevista telefónica para Siglo Nuevo.
“El hambre me hizo ser así, porque pues no tuve estudios, ni kínder, ni escuela”, declaró, por lo que además de ser cantante, tuvo que aprender a tocar la tambora. “Cuando no hay chance en la cantada, le damos a la tambora”.
Hace 16 años emprendió su viaje musical de la mano del esposo de una de sus tías, Óscar Lizárraga. Jesús recuerda con alegría que “de morrillo” acompañaba a Óscar a trabajar. Durante este período, Lizárraga lo guio respecto al repertorio musical que le gustaba a la gente y le inculcó el estudio de las letras de las melodías. “Fue mi maestro”, complementó Navarro.
Jesús fue bautizado por el gremio como “El Trompas”, por sus labios grandes. “Si vienen a Mazatlán y preguntan por ‘El Trompas de Sinaloa’ le van a dar santo y seña de mí”. Formó parte de la banda Hermanos Romero de Mazatlán, Sinaloa, y actualmente colabora con quien lo invite: “Ahorita andamos con una, con otra, con las que me inviten, andamos hueseando”.
Diariamente recorre la playa con 13 músicos. Su jornada laboral empieza a mediodía y culmina por la noche; en ocasiones a las 20:00 y otras a las 21:00, ya que después de las 22:00 ya no se puede estar en la playa.
En casa lo esperan su esposa y su hijo menor, de 13 años, quien “ahí la lleva, poco a poquito”, en cuanto a la música. Su primogénito, un joven de 17 años, ya canta y ha grabado para un grupo norteño.
Jesús es uno de los músicos sinaloenses que vio amenazada su forma de trabajo en marzo de este año, cuando la cultura sonora de Mazatlán se convirtió en polémica.
¿SE PROHIBE LA BANDA?
La génesis de la situación se remonta a un video que se viralizó en redes sociales, donde un grupo de extranjeros escuchaban música de trova en vivo, cuando de pronto esta se vio interrumpida por el fuerte sonido de la banda que comenzó a tocar simultáneamente, ante el disgusto de los asistentes.
Esta “bola de nieve” fue creciendo, ya que se emitió una alerta llamada “Alianza Antiruido”, la cual difundió imágenes de un cartel bilingüe frente al condominio Camino al Mar, donde se prohibía la contratación de bandas en la zona de playa frente a este lugar.
En otro video viral, el empresario hotelero Ernesto Coppel, dueño y fundador del Grupo Pueblo Bonito Golf & Spa Resorts, dice: “No podemos permitir ni un momento más este escándalo de ruido cacofónico que se genera […] A mí me gusta la música de banda, pero son un escándalo, son un desastre en las playas mazatlecas. No dejan descansar a la gente, yo tengo muchas quejas de cientos de turistas americanos que me dicen ‘no vuelvo a Mazatlán por el escándalo y el ruido que provoca que tengan una proyección de destino turístico chafa’”.
La pretensión de prohibir las bandas tuvo una reacción y los músicos alzaron la voz a manera de protesta. La tarde del miércoles 27 de marzo, las calles de Mazatlán se inundaron de música como parte de una manifestación, en la que trascendió que hubo agresiones por parte de las autoridades de Mazatlán hacia los manifestantes.
A su vez, mientras los músicos unían fuerzas, el tema se puso sobre la mesa en distintos medios de comunicación y los internautas opinaron al respecto a través de redes sociales.
Con posturas divididas, algunos defendieron a las bandas, asegurando que los turistas que visitan “la Perla del Pacífico” saben de antemano que ahí predomina ese género, por lo que, si buscan un ambiente más relajado, existen otras playas donde sí lo hay. Por supuesto, también hubo quien opinó que esta música es “molesta”, por lo que debería regularse.
El concepto de gentrificación también empezó a asociarse con la situación. De acuerdo a la Real Academia Española, “gentrificar” significa “renovar una zona urbana, generalmente popular o deteriorada, mediante un proceso que implica el desplazamiento de su población original por parte de otra de mayor poder adquisitivo”.
Ante la posibilidad de que los reclamos de los turistas modificaran la dinámica de los músicos en Sinaloa, éstos defendieron su labor, apoyados por cierta parte de la sociedad, como muestra de resistencia a un cambio que ha ocurrido en otras zonas del país.
Según el texto Gentrificación turística, presentado por Laura Jacqueline Ramírez Espinosa, Arturo Méndez Quiroz y Mario Samuel Ceballos López, la gentrificación “ha provocado grandes cambios en la estructuración de las ciudades, los gobiernos se han enfocado en ofrecer sus destinos más llamativos para conseguir así una mayor cantidad de ingresos”.
SE UNEN A LA PROTESTA
Dentro de los internautas que se unieron a la protesta musical, destacaron diferentes famosos.
“Este video va para todos mis colegas músicos, de Mazatlán, Sinaloa, llámense bandas, llámense norteños, llámense mariachi, llámense de cualquier corriente musical. Hago este video para decirles, plebes, que estoy con ustedes” publicó Luis Ángel “El Flaco” el 28 de marzo, mostrando su molestia por los hechos acontecidos.
“Les doy mi apoyo total a los músicos de Mazatlán… ¡Yo me inspiré en Mazatlán! ¡Imagínate!”, dijo el cantante Edwin Luna. El Coyote, Edén Muñoz y muchos otros artistas más mostraron su apoyo vía redes sociales.
En otro video se ve a los integrantes de Grupo Firme presentarse frente a la residencia de Coppel para defender la música. Eduin Caz, vocalista de la agrupación, cuestionó al empresario: “Entonces ¿se puede tocar banda en las playas, sí o no?”, a lo que Ernesto le respondió: “Claro que se puede tocar, nunca se pensó prohibir”.
El alcalde de Mazatlán, Édgar González, dijo en un video: “comentarles que nosotros como administración hemos sido unos aliados y respetamos el trabajo y la identidad de nuestra música que nos caracteriza, a todos los sinaloenses y en específico a los mazatlecos. Una identidad y una historia que respalda totalmente el tema de la música sinaloense, de la música de banda”, añadiendo que han permitido que los músicos puedan trabajar en la playa, pero hizo hincapié en que se tienen que registrar para tener un orden.
El 28 de marzo, integrantes de agrupaciones y autoridades municipales de Mazatlán lograron un acuerdo para que las bandas pudieran tocar en las playas. Los músicos podrán trabajar hasta las 10:00 de la noche en el área de playa, disponiendo luego de espacios específicos hasta la una de la madrugada.
En abril, el multimillonario presidente de Grupo Salinas, Ricardo Salinas, subió a su cuenta oficial de X (antes Twitter) una foto junto a Neto Coppel y Poncho Lizárraga, líder de El Recodo.
“Ya decidimos cómo le vamos a ayudar a los jóvenes que buscan ganarse la vida tocando la bella música de banda en las playas de Mazatlán, porque está prohibido prohibir y nos vamos a juntar para ayudarlos, mi amigo Ernesto Coppel, @PonchoLizarraga y yo”, se lee en la publicación de Salinas Pliego.
¿CÓMO ESTÁN LOS MÚSICOS ACTUALMENTE?
Jesús Javier García Navarro, “El Trompas de Sinaloa”, reconoció que las declaraciones de los hoteleros respecto a la música de banda “enfurecieron a la musicada”; sin embargo, “gracias a Dios” llegaron a un acuerdo con el presidente municipal.
Actualmente ya están trabajando muy bien y están a gusto, según su versión.
“Hasta ahorita todo bien, hay unos que no aceptan las reglas, hay unos que sí”, admitió, resaltando que la mayoría está conforme. Destacó que, si hay reglas, “hay que saberlas respetar”.
“Estamos tranquilos, a gusto, trabajando muy a gusto con ellos (el gobierno), ellos también con nosotros; hasta ahorita no nos molestan, ni nosotros a ellos”. Carnaval de Mazatlán en 1933, amenizado por música de vientos.
Él y Alexis Magaña son los encargados del Comité de Música de Banda, donde se brinda apoyo al músico que lo necesite. El martes 16 de abril fue su primera junta y asistieron alrededor de 150 personas.
Llevan un control de las bandas que hay actualmente, debido a que hay algunas que sólo van en temporada alta. La zona alberga músicos locales, pero también foráneos, provenientes de Guerrero, Ciudad de México y Oaxaca, por mencionar algunos lugares.
“No vayan a creer lo que dice la gente de que el músico es millonario, tiene billetes, n’ombre. Quisiera que la gente que habla eso y dice eso viniera para acá a vernos cómo andamos con la mochila en el hombro, cómo caminamos en la arena de punta a punta en la playa para poder ganar un peso. Nada es fácil en la vida”.
Jesús Javier García Navarro opinó sobre las declaraciones de algunos turistas: “Hasta ahorita estamos muy agradecidos con el turismo. Porque hay mucho turismo que han hecho comentarios buenos y comentarios malos, pero son más buenos que malos”.
Las bandas aparecen frecuentemente en contextos festivos para el mexicano, por lo que no es de extrañarse que se defiendan. Es un hecho que la música de banda es una actividad imborrable de la cultura mazatleca.