Brian Cohee Jr (ESPECIAL)
El hallazgo de una cabeza humana en el armario del dormitorio del joven Brian Cohee Jr, hizo saber a su madre que algo no estaba bien con él y que, desde ese momento, su vida cambiaría para siempre.
Corría el año 2021, más específicamente el 1 de marzo, cuando Terri Cohe, de la ciudad de Grand Junction, Colorado, EUA, empleaba el día para realizar la limpieza en la habitación de su hijo de 19 años, aprovechando que éste se encontraba ausente.
Sin embargo, más allá del desorden, la mujer hizo un terrible descubrimiento: una cabeza humana que se encontraba oculta en el interior del armario del joven.
Horrorizada por el hallazgo, pero intentando mantenerse estoica, antes de llamar al 911, la mujer se comunicó primero con su marido para comunicarle lo que había encontrado en el cuarto de Brian y después le habló a éste para pedirle que regresara de inmediato a casa.
"Hola, esta es una emergencia. Encontré algo en el armario de mi hijo, envuelto en una bolsa de plástico, una cabeza humana...", dijo Terri a la policía durante su llamada.
Según recoge el portal Infobae, la mujer señaló que primero encontró una bolsa de plástico de la que emergían larvas y al revisarla, llevándola a la cocina, encontró la cabeza humana.
Tras la llegada de los agentes de la policía, Brian se vio interrogado por el hallazgo en su habitación.
Sin inmutarse, el joven confirmó que en efecto la cabeza humana se encontraba en su armario y no sólo eso, sino también dos manos cercenadas que luego los agentes encontraron en otra bolsa de plástico.
Finalmente, Brian terminó por confesar que había acabado con la vida de Warren Barnes, un hombre de 69 años que vivía en la calle y que, sólo era la primera victima de otras que tenía en mente, pues Brian planeaba volverse un asesino serial famoso.
Un hombre querido por la comunidad
Contrario a lo que el joven creía, Warren era un vecino querido por la comunidad aunque viviera en la calle, pues tan pronto desapareció dueños de negocios que solía frecuentar notaron su ausencia, por lo que reportaron la situación a la policía el día 28 de febrero.
En honor al hombre mayor, miembros de la comunidad colocaron una escultura en su honor, recordando a Warren como 'el hombre que lee', pues todos los días solía sentarse en la calle a leer libros que le prestaba el dueño de una biblioteca.
Creían que era una broma
En cuanto a Brian, sus padres señalaron que sí habían notado que su hijo tenía gusto por las 'cosas mórbidas', pero que imaginaban que era porque quería dedicarse a ser forense o algo por el estilo.
Sin embrago, también Brian les había confesado las ganas que tenía de asesinar a alguien y cómo lo haría, pero sus padres simplemente le decían que 'no pensara en esas cosas', pues creían que no se trataba más que una broma de humor negro.
Luego de juicios que se realizaron durante principios del año pasado, Brian fue condenado a cadena perpetua y sin derecho a libertad condicional.