General de División, Mariscal de Campo don Vicente Guerrero Saldaña, fue el segundo Presidente de México, y caudillo de la Independencia.
RUMBO AL BICENTENARIO DE LA INDEPENDENCIA DE MÉXICO Y EL CENTENARIO DE LA REVOLUCIÓN MEXICANA
Datos del Tomo II, Libro 7 de mi obra "La Independencia y los Presidentes de México", inédita, con 69 libritos en trece tomos y con 6,190 cuartillas. Ahora corresponde este artículo al segundo Presidente del México Independiente, General de División, Mariscal de Campo don Vicente Guerrero Saldaña y Campos de Rodríguez, nacido el ocho de agosto de 1782 en el pueblo de Tixtla del hoy Estado de Guerrero y su nombre completo fue Vicente Ramón, hijo de don Juan Pedro Guerrero y de doña Ma. Guadalupe Saldaña y Campos Rodríguez, de arraigo religioso ancestral, creció ejerciendo el trabajo de arriero con una buena recua de burros caminaba por los caminos del sur, de pueblo en pueblo llevando mercaderías para su venta.
Al iniciarse la guerra de independencia en 1810, Guerrero se sentía entusiasmado por la causa de la libertad, uniéndose a las fuerzas de Morelos que comandaba don Hermenegildo Galeana el mes de octubre de 1810, con el nombramiento de Capitán ordenado por Morelos, participando en varias acciones de combate, pero la mayor victoria fue lograda el 23 de febrero de 1812 contra las fuerzas realistas que mandaba De Llano, luego se unió a Morelos en las desgraciadas luchas de 1813 en Carácuaro y Valladolid.
En 1815, Guerrero ya comandaba ejército con el que se enfrentó a las fuerzas realistas de Armijo, obteniendo algunos triunfos. Después de varios años de lucha sirviendo al gobierno de Victoria, fue postulado candidato a la Presidencia de la República por el Partido Yorkino, contra el General Gómez Pedraza, que postulaba el escocés, obteniendo Guerrero el triunfo el 1o. de septiembre de 1828. El 1o. de abril de 1829, tomó posesión de la Presidencia, teniendo problemas con el Ministro Plenipotenciario de los Estados Unidos Joel R. Poinset, que traía instrucciones de dividir a los jefes mexicanos y obtener territorio para su país. También traía fuerte lucha contra el General Anastasio Bustamante, lográndose que el Congreso imposibilitara a Guerrero para ejercer el Supremo Poder Ejecutivo, por lo que con un regular ejército se cuela a los caminos del sur que tan bien conocía para combatir al poder que lo desalojaba de la Presidencia, el cuatro con fecha cuatro de febrero de 1830, siendo perseguido fuertemente por el ejército en el poder.
Guerrero se embarcó en el Puerto de Huatulco a bordo del Bergantín Colombo el 25 de enero de 1831, a donde fue invitado por el capitán don Francisco Picaluga, para un almuerzo, pero éste lo traicionó y lo entregó a las autoridades enemigas y el ocho de febrero de 1831, lo llevaron prisionero al convento de Santo Domingo en Oaxaca.
Fue interrogado, procesado y sentenciado a muerte, con mucha prisa, ejecutando la sentencia, en mi pueblo de Cuilapa el 14 de febrero de 1831, se le condujo al costado del curato del pueblo y puesto de rodillas fue ejecutado, sepultando sus restos en la iglesia del curato. El traidor Picaluga, huyó al extranjero.
El General don Antonio López de Santa Anna, compadre y amigo de Guerrero, logró que el Congreso declarara, postmortem, a Guerrero benemérito de la patria el cuatro de abril de 1833.
Los restos de Guerrero, por acuerdo del Congreso de Oaxaca, fueron trasladados de Cuilapa a Oaxaca y posteriormente fueron trasladados a la Ciudad de México y depositados en la Columna de la Independencia.
El Estado de Guerrero lleva su nombre por decreto expedido por el presidente don José Joaquín de Herrera el 27 de octubre de 1849.