Ante la superioridad técnica de los ibéricos, la defensa rusa fue amonestada en su totalidad, incluso Roman Sharanov se fue a las regaderas, al impedir el segundo gol de los españoles, en los botines de Fernando Torres.
Ante la superioridad técnica de los ibéricos, la defensa rusa fue amonestada en su totalidad, incluso Roman Sharanov se fue a las regaderas, al impedir el segundo gol de los españoles, en los botines de Fernando Torres.Foto:AP y Reuters 13 de junio 2004.
publicada el 13 de junio de 2004