Las partes del arándano como semillas, cáscara y pulpa estimulan la buena salud.
La naturaleza concentra en ciertas frutas, verduras y otros alimentos cualidades extraordinarias y que se pueden obtener de un sólo trago.
La idea de obtener de los frutos lo mejor para el bienestar convence cada vez a más personas, gente que modifica su dieta y eleva el consumo de vegetales y baja el de carnes y grasas.
Un fruto que ofrece grandes recompensas en cuanto a salud y nutrición es el arándano, una especie de uva americana.
El arándano contiene buenas cosas como proantocianidinas: taninos condensados que se cree ayudan a mantener la salud impidiendo que ciertas bacterias patógenas se adhieran a las paredes de vías urinarias, boca y estómago, vitamina C y flavonoles, que aportan beneficios a la salud. Algunas de sus partes como semillas, cáscara y pulpa estimulan la buena salud.
Alivio natural
Especialistas en el campo sanitario no tienen duda en que el jugo de esta fruta ayuda a mejorar la salud dental. Esto porque posee una propiedad antiadherente, que reduce las bacterias en boca, placa dental y caries.
Es bueno, dicen, para el corazón, ya que beber una porción de jugo de arándano al día ayuda a proteger el sistema cardiaco gracias a sus propiedades antioxidantes. Un estudio reciente sugiere que puede ser tan bueno al corazón como el vino tinto.
Más aún, señalan que el consumo regular de jugo de arándano brinda protección contra enfermedades en las vías urinarias, ya que, según algunas investigaciones, es efectivo contra ciertas bacterias causantes de las infecciones, incluso varias que son resistentes a los antibióticos.
Escudo efectivo
Los arándanos, afirman especialistas en la materia, son una herramienta natural para reducir ataques de enfermedades que acompañan la comida. Esto gracias a su cualidad única de reducir el crecimiento de Salmonella y E. coli, así como de otras bacterias que se pueden encontrar en los alimentos.
Indican que su jugo con calcio ayuda a desarrollar y mantener los huesos fuertes. Además, las propiedades antioxidantes sirven al cuerpo para protegerse de los efectos dañinos de los radicales libres que pueden contribuir al desarrollo de males como cáncer, cataratas, Parkinson, artritis, Alzheimer y signos de envejecimiento.
Raíz nutritiva
Por si todas esas virtudes fueran pocas, se sabe que el arándano ofrece al cuerpo humano dosis de nutrientes globales, como vitamina C, un antioxidante esencial que impulsa el buen funcionamiento del sistema inmunológico y mantiene la salud del corazón.
Contiene fibra/pectina, la cual ayuda a conservar la salud gastrointestinal y puede proteger ante enfermedades del corazón ayudando a bajar el colesterol malo de la sangre.
Sus flavonoles/quercetina son antioxidantes naturales que pueden tener actividad antiinflamatoria, antialérgica y/o anticarcinógena. La quercetina es uno de los antioxidantes más poderosos que actúan como recubrimiento antiadherente en el flujo sanguíneo para prevenir depósitos y acumulación de la pegajosa placa de colesterol.
Son buenas hasta las semillas, pues poseen Omega3-áidos grasos poliinsaturados benéficos que protegen la salud del cerebro y corazón. Incluso, la cáscara es rica, pues en ella se encuentran antocianinas, pigmentos de rojo oscuro a azul que actúan como potentes antioxidantes, en algunos casos más potentes que las vitaminas C y E.