Estudios del Instituto Nacional del Cáncer, en Estados Unidos, han demostrado que el consumo de este fruto ayuda a combatir el cáncer, gracias al rojo intenso de su pulpa y cáscara, que tienen sustancias antioxidantes llamadas carotenoides, las cuales contienen propiedades curativas contra el cáncer. ARCHIVO
Los orígenes del jitomate se remontan a tierras mexicanas, aunque se sabe que existía en diversas partes de América del Sur.
Los aztecas solían llamarlo xictlitomatl, palabra que denominaba a los frutos y que a través del tiempo se tradujo en jitomate. Es una verdura que se encuentra todo el año en México, aunque su precio lo marca la temporada.
Es una de las hortalizas más importantes heredadas de México al mundo. Estudios del Instituto Nacional del Cáncer, en Estados Unidos, han demostrado que el consumo de este fruto ayuda a combatir el cáncer, gracias al rojo intenso de su pulpa y cáscara, que tienen sustancias antioxidantes llamadas carotenoides, las cuales contienen propiedades curativas contra el cáncer.
Asimismo, su cascarilla y las pequeñas semillas que lo acompañan benefician al organismo en fibras y proteínas.
El jitomate es uno de los ingredientes más trascendentes que América aportó como fruto comestible. Ha dado un giro a la gastronomía mundial por su sabor y sus propiedades nutritivas.
De extraordinaria variedad, sabor y frescura, el jitomate aporta diariamente al organismo grandes cantidades de calcio, hierro, vitamina C, potasio, zinc, magnesio y sodio.
En la gastronomía destaca en las salsas mexicanas, ensaladas, cremas, estofados, jugos y demás platillos.
Es uno de los ingredientes más representativos de la cocina mediterránea y ha dado un toque fresco a las ensaladas que tienen como base rodajas de jitomate crudo, acompañadas de queso fresco, aceitunas negras y aceite de oliva.
Gracias a su sabor va muy bien en la preparación de salsas, lasaña y pizzas. Ha sido adoptado por la cocina hindú con los famosos jitomates capeados y, sin jitomate la cocina española no hubiera creado su tradicional gazpacho andaluz.
Actualmente, en el mercado existen tres variedades de jitomate: bola o roma, guaje o saladette y cherry, que goza de gran aceptación en el extranjero.
También se puede disfrutar en crudo, con un toque de cilantro, albahaca, echalote, estragón, comino, aceitunas o sólo con un toque de aceite de oliva.