4 mitos sobre el cáncer de próstata
El cáncer de próstata está rodeado de muchos mitos que pueden generar temor y confusión. Para desmentirlos, el urólogo Héctor Sánchez López se pronunció al respecto.
1. "El tacto rectal hace que pierdas la masculinidad"
Uno de los mitos más comunes es el miedo a perder la masculinidad al realizarse un tacto rectal, por lo que el doctor aclaró que este procedimiento no tiene ningún efecto sobre la masculinidad de un hombre. "El tacto rectal es una herramienta importante para la detección de problemas prostáticos cuando los exámenes de sangre o ultrasonidos lo requieren".
2. "Estoy bien, no pasa nada, no hace falta ir al médico"
Otro mito es que, al no buscar ayuda médica, los hombres evitan problemas. Sin embargo, el especialista resaltó que ignorar los síntomas solo empeora la situación. "Detectar el cáncer de próstata a tiempo o puede marcar la diferencia entre una cura y un tratamiento limitado", subrayó.
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En México, el cáncer de próstata es la primera causa de muerte en hombres mayores de 65 años, aunque también es posible que se presente en menores de 50.3. "Sólo afecta a hombres mayores"
Si bien es cierto que el riesgo aumenta con la edad, hombres más jóvenes también pueden desarrollar cáncer de próstata. "Los hombres menores de 50 años también pueden desarrollar cáncer de próstata, especialmente si tienen factores de riesgo como antecedentes familiares o estilo de vida poco saludable", dijo.
4. "No tiene cura"
Varios pacientes pueden curarse si el cáncer se detecta antes de que se haya propagado por fuera de la glándula prostática. Sánchez puntualizó que, si el cáncer de próstata se detecta a tiempo, es curable en un 85 por ciento de los casos.
La prevención y el diagnóstico temprano, claves para la supervivencia
Por último el médico dijo que mensaje final es claro y directo: la prevención y el diagnóstico temprano del cáncer de próstata son fundamentales para aumentar las tasas de supervivencia y mejorar la calidad de vida de los pacientes.
"Si detectamos el cáncer en etapas tempranas, tenemos muchas más probabilidades de curarlo. En cambio, si esperamos demasiado y lo encontramos en etapas avanzadas, las opciones de tratamiento son limitadas", concluyó.